Esta es la primera pregunta que nos hicimos cuando decidimos crear nuestra propia empresa y la que se suelen hacer la mayoría de los emprendedores antes de dar el paso. Por ello, vamos a resumir los puntos que consideramos más importantes para intentar ayudar a aquellos que se encuentran en esta situación.

Buscar financiación es un trabajo en si mismo. #startuptips Clic para tuitear

Los tipos de financiación se suelen clasificar en función de la fase en la que se encuentra tu startup:

Fases de una startup

Etapa inicial, fase semilla o seed stage

Esta fase es el momento en el que tienes una idea, crees que puedes hacer algo grande y tienes muchas ganas de arrancar. También es el momento en el que te preguntas ¿cómo puedo conseguir dinero para llevar a cabo mi idea?

Tienes que tener en cuenta que esta etapa es la más crítica para buscar inversión ya que normalmente tu proyecto no suele ser más que una idea, quizás un documento o en el mejor de los casos un borrador del plan de negocio.

Invertir tu propio dinero

Esta es la mejor opción porque arrancas sin ningún tipo de presión ni deuda. Además es la mejor manera de demostrar que realmente crees en tu idea.

Es difícil convencer a alguien para que invierta en tu startup cuando tú mismo no lo has hecho Clic para tuitear

Dependiendo del tipo de startup la inversión inicial puede ser mínima o muy grande, por lo que quizás no sea suficiente con el capital de los socios fundadores. En ese caso, lo ideal es complementar la inversión con alguna de las siguientes alternativas:

Recurrir a las 3F (Family, friends and fools)

Nadie mejor que tu familia, amigos y conocidos como para asumir un riesgo tan alto y creer en algo que aun no existe. En el fondo es un acto de fe, porque en vez de invertir en tu proyecto, están invirtiendo en la capacidad que creen que tienes para llevarlo a cabo.

Este tipo de inversiones según un informe de IE Business School suelen rondar entre 5.000 y 10.000 euros.

Inversión pública

Otra opción es buscar ayuda en organismos públicos que después de estudiar la viabilidad de tu idea te ofrecen préstamos con condiciones muy ventajosas. Un buen ejemplo de ello es ENISA (Empresa Nacional de Innovación) que ofrece diferentes lineas de crédito en función de tu edad o tipo de actividad. Se trata de una de las ayudas públicas más populares en el sector startup porque no pide garantías, tiene comisiones muy competitivas y ofrece una carencia de hasta 5 años. El mayor inconveniente es que para solicitarlo ya tienes que tener dada de alta la actividad y tu capital social debe ser como mínimo el 50% del crédito que quieres solicitar.

Los créditos ENISA van desde 25.000 hasta 2.000.000 de euros.

Incubadoras

Actualmente existen incubadoras prácticamente en todas las capitales del mundo. Las hay de todo tipo, algunas están especializadas en un sector específico, como por ejemplo, Demium Games (incubadora de videojuegos mobile) y ofrecen recursos de todo tipo: mentores, formación, asesoramiento, oficinas, inversión…

Esta opción es muy interesante aunque no busques financiación, por los recursos, contactos y visibilidad que pueden aportar a tu proyecto. Nosotros, por ejemplo, nos apuntamos en mayo en un programa de Y Combinator, una incubadora de California que está especializada en startups en etapa inicial. Fue nuestra primera experiencia y no conseguimos entrar pero aprendimos mucho y nos ayudó a madurar la idea. Ahora mismo está abierta la inscripción de nuevos proyectos hasta el 4 de octubre y vamos a volver a intentarlo 😉

Crowdfunding

Por último quería incluir las plataformas de crowdfunding porque es otro método muy utilizado en ciertos sectores, como por ejemplo, el de los videojuegos. Es una forma muy interesante de financiar y además validar una idea, ya que no solo consigues el dinero necesario para arrancar tu empresa sino que estás comprobando que tu producto tiene público.

Hoy en día existen infinidad de plataformas de crowdfunding aunque las más populares a nivel internacional siguen siendo Kickstarter e Indiegogo. En España destaca Lánzanos con más de 300 proyectos financiados.

Estas son las principales formas de financiación para startups en ‘Fase Semilla‘. La siguiente etapa se conoce como ‘Early Stage‘ o ‘Lanzamiento‘ que comienza cuando la startup ya cuenta con un ‘MVP‘ (producto mínimo viable) de su producto o servicio. En próximos posts iremos explicando el resto de fases a medida que las vayamos alcanzando en Muquo, para compartir nuestra experiencia en cada una de ellas.